La historia de hoy les llega 5 dias tarde, era lunes en la mañana y yo estaba muy emocionado por irme al gimnasio, tome mi bici y salí de ida es de bajada entonces agarras buena velocidad y con la emoción acumulada del fin de semana, es fácil dejarse llevar.
Lleguè a un semáforo y pues traía "vuelito", en eso vi aun peatón que se cruzo en el mismo sentido en que yo iba y como ambas calles (en la que yo iba y la que cruzaba) estaban vacías decidí no frenar por completo y pasarme el alto, 5 segundos después de pasarme me dije "Oye compaye!! no te andes pasando aunque no venga nadie" a los 30 segundos escucho una sirena... Ya valió esto!!
Me orille, deje mi bici, me acerque a la patrulla y me quite los lentes, era una camioneta mercedez de las que parecen minivan, una mujer policía iba al volante y su copiloto era hombre, la mujer me dijo que si sabia por que me había parado y le dije que por pasarme el alto, "yep" me contesto, después revisamos un poco del reglamento de transito para bicicletas y me pregunto por que me había pasado el alto, no quería mas broncas así que fui completamente honesto, le dije que había sido un tonto y me dijo que la multa es de $350 dolarucos, es una multa bastante pesada (según la propia oficial), me estuvo regañando un rato y yo pues como perro castigado porque estaba completamente de acuerdo con ella, me arrepentí al instante.
Al final de todo me dejo ir con un "warning" (fiuf) pero me dijo que ya no me ande pasando, ese consejo ya me lo había dado yo mismo unos minutos antes así que definitivamente ya no me voy a pasar los altos para coches ni para peatones ni nada, tengo que ser mucho mas cuidadoso.
Yo creo que el hecho de quitarme los lentes de sol fue mi primer acierto después del desacierto porque según yo fue una señal de mi parte hacia ella de "no te voy a mentir, mírame a los ojos, veras lo que soy, me comprendes mendez?, no se por que no entiendes..." (cortesía de control machete). Creo que la polecia ha sido muy buena conmigo desde que llegue, te dicen donde esta todo, son amables, te protegen de los aborígenes toca panzas, en fin... leccion aprendida.
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